Obituario for Luzmila Coombs Dixon
Luzmila Coombs Dixon, known affectionately as Sylvia, was born on November 19, 1934, to Elvira Dixon and Edgar Coombs. She was part of a close-knit and loving family with six sisters, where she lived a life filled with love, laughter, and an unwavering devotion to her family.
Sylvia's nurturing spirit and constant support defined her character, making her a favorite aunt, lively sister, loving daughter, and exceptional mother. Her presence was a source of strength and inspiration for all her children and grandchildren, providing guidance and love whenever needed.
In 1982, Sylvia pursued her dream of becoming a chef when she migrated to the United States, but her path led her to discover her true calling as a baby nurse. Her inherent caring nature and genuine love for others shone brightly in this role, leaving a lasting impact on the families she served.
As Sylvia entered her later years, she moved to Texas at the age of 72, embracing independence and living life to the fullest. At 83, she found comfort living with her daughter Gizell, who lovingly cared for her and understood her physical and mental health status and provided to her needs in her remaining years.
Sylvia's vibrant zest for life touched everyone she encountered, with a deep passion for travel and creating lasting memories. Her infectious laughter and willingness to help endeared her to all who had the privilege of knowing her.
Sylvia embraced motherhood wholeheartedly and was blessed with twelve children. While she mourned the loss of Silvio A Coombs and Marlyn Williams, she is survived by Tanya Williams, Alfredo Williams, Javier Williams, Omar Williams, Tirza Williams, Jacqueline Williams, David Williams, Gizell Williams, Alexis Wilson, Michael Wilson, and their families. Sylvia's legacy extended to her proud role as a grandmother to thirty-three grandchildren, fifty great-grandchildren, and one great-great-grandchild.
On [Date], Sylvia Coombs Dixon peacefully passed away, leaving behind a legacy of love, laughter, and cherished memories. Her absence is deeply felt by her family and all those she touched. Sylvia's spirit will continue to live on through the countless lives she impacted, and her memory will be forever treasured.
Honoring the life of Luzmila Coombs Dixon, we celebrate a woman who embraced life, loved unconditionally, and left a lasting impact on all who knew her. Sylvia's warm smile and compassionate nature radiated kindness wherever she went. Her unwavering support and selfless acts of love touched many, and her legacy of empathy and generosity will inspire generations to come. May her soul rest in eternal peace, knowing she brightened the world with love and kindness.
Español
Luzmila Coombs Dixon, cariñosamente conocida como Sylvia, nació el 19 de noviembre de 1934, de Elvira Dixon y Edgar Coombs. Formaba parte de una familia unida y amorosa con seis hermanas, donde vivió una vida llena de amor, risas y una devoción inquebrantable hacia su familia.
El espíritu de cuidado y el constante apoyo de Sylvia definieron su carácter, convirtiéndola en una tía favorita, hermana animada, hija amorosa y madre excepcional. Su presencia era una fuente de fortaleza e inspiración para todos sus hijos y nietos, brindando orientación y amor siempre que fuera necesario.
En 1982, Sylvia persiguió su sueño de convertirse en chef cuando emigró a los Estados Unidos, pero su camino la llevó a descubrir su verdadera vocación como enfermera de bebés. Su naturaleza innata de cuidado y su genuino amor por los demás brillaron intensamente en este papel, dejando un impacto duradero en las familias a las que sirvió.
Al entrar en sus últimos años, Sylvia se mudó a Texas a la edad de 72 años, abrazando la independencia y viviendo la vida al máximo. A los 83, encontró consuelo viviendo con su hija Gizell, quien la cuidó amorosamente y entendió su estado de salud físico y mental, brindándole lo necesario en sus últimos años.
El entusiasmo vibrante de Sylvia por la vida tocaba a todos los que encontraba, con una profunda pasión por viajar y crear recuerdos duraderos. Su risa contagiosa y disposición para ayudar la hicieron querida por todos los que tuvieron el privilegio de conocerla.
Sylvia abrazó la maternidad con todo su corazón y fue bendecida con doce hijos. Aunque lamentó la pérdida de Silvio A Coombs y Marlyn Williams, le sobreviven Tanya Williams, Alfredo Williams, Javier Williams, Omar Williams, Tirza Williams, Jacqueline Williams, David Williams, Gizell Williams, Alexis Wilson, Michael Wilson, y sus familias. El legado de Sylvia se extendió a su orgulloso papel como abuela de treinta y tres nietos, cincuenta bisnietos y un tataranieto.
En Mayo 4 2024, Sylvia Coombs Dixon falleció pacíficamente, dejando un legado de amor, risas y recuerdos incontables entrañables. Su ausencia se siente profundamente por su familia y todos aquellos a quienes tocó. El espíritu de Sylvia continuará viviendo a través de las innumerables vidas que impactó, y su memoria será para siempre valorada.
Al honrar la vida de Luzmila Coombs Dixon, celebramos a una mujer que abrazó la vida, amó incondicionalmente y dejó una marca duradera en todos los que la conocieron. La cálida sonrisa y la naturaleza compasiva de Sylvia irradiaban bondad dondequiera que fuera. Su apoyo inquebrantable y actos desinteresados de amor tocaron a muchos, y su legado de empatía y generosidad inspirará a generaciones por venir. Que su alma descanse en paz eterna, sabiendo que iluminó el mundo con amor y bondad.